Había pensado llamar a esta entrada así: Esta es una entrada de blog. Esta entrada es principalmnente un comentario inargumentado y aleatorio sobre The Black Keys, los cuales no he escuchado mucho. Sé que es el peor título que jamás le podría poner a una entrada. Es obvio, redundante, largo (muy, pero que muy largo) y seguro que no ha captado la atención de nadie. Diría que es un mal título de manual. Pues bien, hay un cierto grupo que utilizó un nombre así para su álbum, allí por el 2010. Y les quedó bien. Estoy hablando de The Black Keys.

El disco en cuestión se llamaba Brothers. Incluía alguna canción como esta. Tighten Up. Silbidos y riffs de guitarra hipnóticos. voz distorsionada y una melodía que, aunque no puede parecer pegadiza de entrada, es interesante y se acaba instalando en tu mente para quedarse e intentar conseguir que la tararees. Yo no tarareo. Canto mentalmente. Un sonido sucio y diáfano a la vez.

                            

La portada, que comentaba al principio de la entrada, ganó el Grammy al mejor envoltorio. Está basada en la de The Howlin' Wolf Album de 1969, una de las influencias del grupo.

No he escuchado todas las canciones ni ningún álbum entero de Tha Black Keys. Lo reconozco. Los estoy descubriendo. Pero de lo que escuchado, puedo decir que es una música muy gráfica. Seguramente no es algo intencionado, pero cada vez que escucho alguna canción suya visualizo una gasolinera solitaria bajo un sol de pleno verano. En el suelo hay polvo, arena y colillas. Un  coche entra en la gasolinera, Es un modelo antiguo, de los setenta tal vez. Alguien se baja del coche. Lleva un sombrero de cowboy y entre sus labios hay algo que en  otro tiempo fue un palillo de dientes pero que ahora simplemente es una astilla. Lleva algo en el bolsillo. De detrás de un surtidor de gasolina, se esconde otra persona, empapada del sudor de verano. Se conocen. Ambos llevan lo mismo en el bolsillo. Se han estado buscando.

Estoy divagando.

Ooooooooooooh I've got a love who keeps me waiting.